Se entrenó el Barça en Almería con el segundo equipo, lo que permitió apreciar el excelente fichaje de Affelay, la calidad de Thyago, la eficiencia de Mascherano y el atolondramiento de Nolito, además de la enorme ansiedad de un Bojan que debería emigrar para salvar su brillante futuro. Enfrente, un Almería con las puntas recortadas y la vista puesta en la Liga, legítimamente orgulloso de su papel en Copa, apenas inquietó los dominios de Pinto. Esta eliminatoria no pasará a la historia, dicho así, en pareado.
Pudo el Madrid con el Sevilla, sin que ello entrañara mejora alguna. Persiste la baja forma (llamadlo cansancio) de un Cristiano al que el Bernabeu pita cada vez que demuestra que le importan más las lamentaciones por sus fallos, errores o supuestas faltas recibidas y no sancionadas que el colectivo. Hace bien el campo en educar al lider de su once, a ver si aprende que lo personal se expresa a través de lo general como la calidad a través de la cantidad. Ardua tarea. Se demostró ayer, una vez más, que ninguno de los defensas del Real saca el balón bien jugado. En cuanto cualquier equipo de mala muerte tapa a Xabi, el Madrid adolece muchísimo de esa preocupante falta de calidad, garantía de dificultades sobrevenidas, pérdidas muy peligrosas y, sobre todo, que aporta esa sensación de inseguridad permanente en una jugada, la salida desde atrás, que debería estar siempre asegurada. No digo nada si ocurre frente a la presión angustiosa en todo el campo que practican algunos equipos y en la que el eterno rival es maestro.
Por eso mismo fue muy de agradecer el cambio de posiciones que realizó un torpe Manzano con la salida de Luis Fabiano, retirando a Kanouté del marcaje de Alonso. Enorme favor le hizo al Madrid, que se reencontró con el desmarque y pase largo cuando más lo necesitaba. De todas formas, me gustó Khedira, más atrevido que nunca, la defensa de Arbeloa sobre Navas, el gran partido de Ozil, todo clase y entrega, y el espléndido de Benzema (qué pasecito corto a Khedira, qué pase largo a Ronaldo...) si descontamos su faceta de rematador. ¿Para cuándo Manolito de delantero centro y el francés de segundo punta? ¡Qué gran descanso para Di María, que lo está pidiendo a gritos! Tampoco le vendría mal a este equipo darle banquillo al portugués, bien de salida (con Marcelo de mediopunta ofensivo) o bien en el trascurso del partido para que jueguen minutos Canales o Pedro León, que deben estar oxidaos, ¡digo yo!
Fiasco en el Senado
Hace 7 horas
¿Manolito es Adebayor? Disculpa mi ignorancia... De todas formas anoche rentabilizó muy bien el escaso tiempo del que dispuso: segunda amarilla a Sergio, en su segunda intervención del partido y golazo en la tercera. Dio sensación de poderío con ese control de pecho y el trallazo de volea. Cuando nos quisimos dar cuenta el balón ya estaba en la red... y ahora el calendario nos depara dos clásicos en cinco días: el de Liga y la final de Copa. ¡Cosa de locos!
ResponderEliminarP.D.: a mí no me pareció tan bueno el partido de Benzema. Si a un delantero le falla el remate ¡ya me dirás! Y además uno fue a puerta vacía. El problema es que te conformas con poco o te pierden las ganas de que te guste.
"...lo que permitió apreciar el excelente fichaje de Affelay, la calidad de Thyago, la eficiencia de Mascherano y el atolondramiento de Nolito, además de la enorme ansiedad de un Bojan que debería emigrar para salvar su brillante futuro".
ResponderEliminarEstupendas y clarividentes éstas tus apreciaciones sobre los jugadores blaugranas.
Creo que ha quedado claro que el evidente "atolondramiento" de Nolito le imposibilita para jugar en la actual primera plantilla del Barça. Como bien sabe Guardiola, por otra parte.
En el tercio de la crónica del Madrid-Sevilla también me gusta lo expuesto y lo comparto. Como comparto también que no pierdas el tiempo mencionando supuestos villaratos y conspiraciones a favor del Madrid (gol fantasma en el Sánchez Pizjuán a favor del Sevilla, gol mal anulado a Negredo por "supuesto" fuera de juego, tarjeta perdonada a khedira por falta a Zokora, otra tarjeta perdonda a Xabi Alonso por agarrón a Navas, penalty de Carvalho a kanoute, tarjeta roja perdonada a Ramos; o también algunos fueras de juego inexistentes pitados a Cristiano...) porque sencillamente el Real Madrid fue en el conjunto de la eliminatoria bastante mejor que el equipo hispalense. Y por supuesto un dignísimo finalista.
Eso sí, me gustaría que esta conducta también la aplicases en las crónicas del Barcelona. Sin deslices sintomáticos de parcialidad y con algo más de ecuanimidad. Tu objetividad mejoraría a ojos de todos y al menos yo te leería com mucha más complacencia.
Si es posible, claro.
PD: me gustaría que te tomaras esta pequeña objeción como lo que es, no como una reprimenda. Si no de qué entraría puntualmente en tu blog, Antonio.
Le llamo Manolito, Adrián, porque así le decían en la peña roteña, y porque le sigo desde la Premier, es como de la familia. En el entradón de Sergio, si te diste cuenta, el balón se lo había adelantado paralelo a la banda, de patada a seguir con mucha clase. Este sí es un delantero centro. Benzema es un segundo delantero que hace goles (arma muy rápido, tiene buen disparo con ambas piernas aunque justito de cabeza), no un killer. Cuando Mou le ponga en su sitio, si sigue trabajando a destajo como es su obligación, ya verás cómo te gustará. Y recuerda su edad...
ResponderEliminarMe encanta que me visites, Arnau, pero si jugara un partido preferiría que no fueras el árbitro. Sobre el balón de Sevilla se ha escrito y hablado la tira. Yo soy de los que creo que entró, pero he visto a montones de "expertos" demostrando con imágenes lo contrario. Tampoco hubo gol anulado a Negredo, el árbitro había pitado antes de su remate. Aunque es cierto que no era fuera de juego (Albiol cubría su posición), no lo es menos que hubo otras dos jugadas (Cristiano y Ozil) en las que también se equivocó el línea (sospecho que era el mismo) también bastante peligrosas. De tarjetas podíamos discutir largo rato, en ambas direcciones, y lo del penalty a Kanouté..., pues eso, meter la cadera un mínimo, que hay de esas y bastante más claras varios miles (exagero) en cada partido. Lo dicho, que mejor te quedabas en la grada a verme hacer el ridículo. ¡Vaya mes de abril que nos espera, con dos enfrentamientos en cuatro días!
A mí también me encanta visitarte, Antonio, pero creo que no me has entendido la razón pura de la objeción. No discuto esa o aquella entrada, ese o aquél gol anulado, lo que discuto (creo que he antes he sido claro) es que pases por alto en tus crónicas los supuestos tejemanejes arbitrales de la semifinal Madrid-Sevilla (cosa que sinceramente celebro) y no hagas lo mismo en las crónicas que el Barça está involucrado, en las cuales siempre deslizas la sospecha en algunos estamentos y equipos contrincantes.
ResponderEliminarNo sé si he sido ahora más claro.
Y piensa que no te exigiría si no me gustara tanto tu razonamiento deportivo.
PD: y lo de árbitro... como que no, Antonio, como que no :)
Coincido contigo en que no fue un partido para archivarlo en la sala de trofeos, pero el hecho es que el Madrid está vivo en las tres competiciones y en liga con un punto más que los que tenía el año pasado. Ya sólo queda convencer a Villar de que dé por pagados (lo están generosamente, sin duda) los favores que debe al Otro (su puesto de trabajo entre otras minucias)y permita que en España y en Europa se arbitre a dicho Otro con los mismos criterios que a los demás equipos ("violines y trompetas" llamabas tú a la actual situación, ¿no?). Y de que no le clasifique para las finales desde el sorteo de partidos, como ha pasado este año en la Copa. En esas utópicas circunstancias igual hasta nos llevábamos el triplete.
ResponderEliminarAntonio como le conoces desde la Premier ¿qué te parece su incorporación?
ResponderEliminarUn recuerdo a dos finales de Copa del Rey: la de la temporada 1979-80, una prueba más del lamentado (que no lamentable) imperialismo blanco; y la del año 84, una prueba más del carácter polideportivo del Barca (lo de poli aquí hace referencia al Potro de Vallecas, y no al prefijo de origen griego)
ResponderEliminarBuena aportación, Joaquín. Efectivamente, en la final del 80 ya se vislumbraba lo que iba a ser la cantera del Real Madrid en la década de los 80: una generación fantástica.
ResponderEliminarEn cambio, la final de Copa del 84 fue un lamentable partido en el que se desató el odio incubado años atrás por las lesiones aterradoras que ocasionó Andoni Goikoetxea a las estrellas del Barça. Por cierto, Andoni, tan gran jugador como deplorable deportista.
http://www.youtube.com/watch?v=PF5DmWQAyIQ
Ante tal aportación de memoria de Joaquín, me voy a sumar a él desempolvando del olvido también un par de finales: la del 68, esa magnífica final jugada en el Bernabéu en la que los aficionados del Madrid arrojaron centenares de botellas de vidrio a los jugadores blaugrana en la llamada "Final de las botellas"; y también la del 90, esa gran final en la que el Madrid, con su derrota, ayudó a germinar el cambio de tendencia en el futbol español y mundial. Sí, nunca el FCBarcelona ni la selección española estarán tan agradecidos a esa final, en la que seguro ayudó a cambiar nuestras historias para llegar a lo que somos ambos en la actualidad.
PD: La barra de hierro que tiraron los ultrasur en esa final y que cayó en la cabeza de Zubizarreta ya es otro cantar. La damos por bien empleada. Ya se sabe, las revoluciones siempre son algo violentas y sangrientas.